El derecho de las niñas a soñar
Todas podemos hacer algo por otra mujer que quiere ser científica. Desde nuestra posición, debemos hacer algo, por responsabilidad, por solidaridad, porque cada vez que una niña habla de sueños y deseos de crecer, sueña en convertirse en una mujer que crea, juega, cuida la salud, enseña, vuela, canta o muchas cosas mas. Un día cuando fui niña, yo también dije: quiero ser científica.
Como maestra tengo la oportunidad de escuchar a las niñas decir que serán futbolistas, doctoras, científicas, psicólogas y muchas profesiones más. Con solo 11 o 12 años ellas tienen claro que pueden soñar con ser esas mujeres que imaginan.
Sin embargo, cuando esas niñas llegan a los 16 o 17 años y tienen que elegir un camino para ingresar a una universidad -si tienen esa oportunidad-, sus opciones se ven modificadas por diversas razones. Es lógico que cambien de opinión, a esa edad tenemos muchas dudas y justo en la adolescencia, se buscan referentes para elegir una carrera o bien qué hacer en el siguiente paso.
Cuando ellas se acercan, escucho sus historias donde los padres, hermanos, primos, la familia entera y hasta los mismos maestros, ponen en duda sus decisiones y no les brindan el apoyo que necesitan para seguir por el camino elegido. En mi opinión, la falta de apoyo y comprensión, es la principal razón por la que una adolescente cambia su elección o bien abandona la escuela superior.
- “Las ciencias no son para las mujeres”
- “Una mujer no tiene nada que hacer en una ingeniería, eso es cosa de hombres”
- “Las mujeres no saben programar”
- “Para que estudias si te vas a casar”
- “Para tener hijos no necesitas estudiar”
- “Las mujeres son para estar en la casa y tener hijos”
- “Si sigues estudiando, no te vas a realizar como mujer”
- “Los pilotos no son mujeres”
- “Estudia algo que sea fácil»
- “Está muy lejos la escuela”
Solo por mencionar algunas frases comunes que las niñas y adolescentes escuchan en su casa, en el entorno social y/o en la escuela. Frases llenas de prejuicios que se quedan en la mente de las jóvenes y muchas veces -desafortunadamente- cumplen su objetivo.
Durante mas de 20 años he escuchado las mismas historias que se repiten en cada salón de clase, cada ciclo escolar. Quienes en casa tienen la suerte de contar con el apoyo de sus padres, seguirán avanzando; sin embargo, muchas niñas en todo el mundo, no tienen la suerte de tener a su lado alguien que las apoye y que brinde ese soporte que necesitan todos los días.
Esta realidad que puede entristecernos, también pueden motivarnos a ser un referente para niñas, jóvenes y mujeres que hoy toman decisiones. Nosotras podemos ser ese pilar que necesitan para lograr sus sueños y ser un precedente para inspirarlas; no solo por ser mujeres de ciencia, sino por ofrecer nuestra mano, cuando alguna de ellas lo necesite.
Un articulo padre el articulo apoyemos a las mujeres y la niñes en general a cumplir los sueños y no dejar de soñar.
Si Laura, tú eres de esas grandes mujeres ejemplo de niñas y niños.
Excelente y muy cierto 🥰😘
Abrazos Lulú.